Gracias por tranquilizar a mama con tus palabras. Ella se sentía culpable por dejarme para ir a trabajar, pero con tu cariño le has hecho saber lo bien que estoy con vosotras, porque he recibido todo vuestro amor.

Gracias por cuidarme y por preocuparte porque coma cada día.

Gracias por tu esmero y por el amor que me has dado.

Gracias por hacerlo todo tan fácil y por hacer de mi una niña feliz.